domingo, 20 de junio de 2010

♺tracción.

Es curioso como podemos hablar y aconsejar a tantas personas, decirles nuestra realidad, después ir por ayuda y saltarnos el proceso más sencillo de escucharnos a nosotros mismos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ME ENCUENTRO EN LA ULTIMA ESCALA QUE ME LLEVARA A MI HOGAR VEO ESTE POST Y JUSTO AQUI COMPLETAMENTE SOLA NO PUEDO ESCUCHAR LO QUE MI CORAZON QUIERE DECIRME, CREO QUE SUENA ALGO ASI COMO A LIBERTAD :)

Yahuas dijo...

Al corazón no se le escucha con los oídos!